Los últimos días de Emma Blank

Categoría: Críticas
Fecha de publicación: octubre 5, 2010
Comentario

En una enorme casa cercana a las dunas, Emma Blank está viviendo sus últimos días. Según dice, pronto morirá de una enfermedad incurable. Es por eso que utiliza, como si fueran sirvientes, a su propia familia. Todos cumplen un papel determinado: la cocinera, la doncella, el mayordomo, el jardinero/mecánico y, cual gota que colma el vaso, el perro…

Ante la llegada de la inminente muerte, Emma decide pasar sus últimos días, a merced de su familia que debe cumplir el rol de sirvientes, esperando la herencia de una fortuna. Pero para esto, las cosas van a hacerse como ella dice, de la forma en que ella quiera y al tiempo que ella decida.

Cabe mencionar la elección del casting que encuadra perfectamente con cada estereotipo de los personajes y las extraordinarias actuaciones de cada uno de ellos. Entre ellos, podemos mencionar al mayordomo (marido/amante) que mantiene el control de todo lo que sucede y de cómo tiene que suceder, y hasta llega a ponerse un bigote postizo a pedido de la señora. Luego tenemos a los jóvenes sirvientes, un muchacho enamoradizo y una chica que no quiere saber nada con él, pero que ambos se encuentran en una etapa de experimentación sexual y revolución hormonal. Un caso aparte es el mismo director del film, que crea un fantástico personaje haciendo de perro en cada una de sus actitudes, demostrando a simple vista, ser una persona común y corriente. Pero frente a su dueña, se transforma súbitamente y responde a los llamados, silbidos, acata las órdenes y también tiene que ser acompañado cada vez que se encuentra en apuros… Siempre y cuando no sea demasiado tarde.
 
Los enredos matrimoniales en este caso se dan a partir de una confusión entre marido/esposa, mayordomo/mucama, y las diversas combinaciones que existen entre ellos, ya que los celos que se plantean, realmente tienen que ver con una diversificación en cuanto al rango de poder de Emma frente a los demás.
 
La música es bastante simple, pero transmite la banalidad del lugar. Una mansión poderosa e inmensa en donde cada personaje de la familia es un mundo aparte pero que todos sirven a los propósitos de la dueña de casa como si fueran tuercas dentro de una gran maquinaria. Y es extraordinario el mensaje que sigue toda esta gente, siendo parte de la familia, al servir de forma continua solamente por la obtención del dinero.
 
Sin embargo, la famosa supuesta fortuna no es tan así como creían, y al momento en que comprenden eso, Emma se encuentra en el suelo tirada esperando que la levanten. Aunque la espera comienza a devastarla y ningún miembro de la servidumbre/familia decide acudir a ella, por lo que termina literalmente muriendo en soledad. Siempre recurriendo al humor negro desde cada una de las acciones que realizan estos extraños personajes, se crea una atmósfera totalmente inhóspita que se torna cada vez más interesante. Podemos recordar la gran escena en que salen a tomar un poco de aire, donde cada personaje intenta disfrutar (a veces bajo presión) del poco tiempo de ocio que tiene, siempre desde la aguda mirada de Emma, hasta que son completamente devorados por la lluvia.
 
Este film presenta un extraño mundo, que sin ir más lejos, muestra las falencias de nuestro “mundo real”: a través de la incomunicación, la falta de respeto de los hijos hacia los padres, la intolerancia, y la deshumanización de la familia actual, bajo las normas de una excéntrica familia que pretende una herencia inexistente a costa de la simulación del cariño, la contención y el amor.
 
Nicolás Isasi




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